Cuando se trata de adquirir una propiedad, existen diversas herramientas y estrategias legales que garantizan los derechos y obligaciones tanto del comprador como del vendedor. Dos de los instrumentos más utilizados son el boleto de compraventa y la cesión de derechos. Aunque ambos brindan garantías sobre el uso y posesión de la propiedad, existen diferencias importantes entre ellos.
El boleto de compraventa es un acuerdo entre las partes, que puede o no contar con la intervención de un notario, en el cual el vendedor se compromete a firmar la escritura de la propiedad en un plazo determinado y a ceder los derechos de posesión, uso y goce al comprador. Por su parte, la cesión de derechos es un contrato mediante el cual se transfieren los derechos y obligaciones establecidos en el boleto de compraventa original, sin incluir necesariamente la obligación de escriturar.
En cuanto a los derechos que se transfieren, en el boleto de compraventa se otorga al comprador el derecho de posesión, uso y goce del inmueble, mientras que en la cesión de derechos se ceden los derechos y obligaciones del boleto original.
Es importante tener en cuenta que para poder realizar un boleto de compraventa, el vendedor debe demostrar ser el titular de la propiedad mediante una escritura traslativa de dominio y que la propiedad esté debidamente registrada a su nombre. Por otro lado, la cesión de derechos solo puede aplicarse cuando ya existe un boleto de compraventa firmado previamente.
En ambos casos, tanto el vendedor como el comprador tienen derechos y obligaciones específicos. En el boleto de compraventa, el vendedor tiene la obligación de escriturar y entregar la propiedad, mientras que el comprador tiene el derecho de solicitar la escrituración en caso de incumplimiento. En la cesión de derechos, el cedente tiene la obligación de entregar y firmar los derechos posesorios, y ambas partes tienen la obligación de presentarse a escriturar.
Los costos asociados a estas transacciones, como honorarios, certificación de firmas e impuestos, pueden ser similares en ambos casos.
En resumen, la elección entre el boleto de compraventa y la cesión de derechos dependerá de la situación particular de cada caso y de las prioridades y necesidades de las partes involucradas.